AGUADO ALONSO, GERARDO
El estudio del lenguaje es una de las taras más sólidamente entroncada en las ciencias humanas. No puede ser de otro modo. Posiblemente es la actividad más claramente circunscrita y exclusiva del hombre. Sin duda, el lenguaje ha sido un factor casual de primer orden en la hominización, y es el vehículo principal y esencial de humanización, de enculturación. Dentro de las ciencias humanas merecen ser destacadas las que se ocupan de la educación. En este caso, el lenguaje adquiere ya unas dimensiones insoslayables, dramáticas. No sólo por su condición de vehículo de la transmisión de conocimientos, sino, sobre todo, por su función formadora de la inteligencia, porque aprender a hablar es apropiarse de las formas de sentir y de pensar de la cultura, transformada en símbolos lingüísticos, en la que el niño está inmerso. Este libro pretende ser una ayuda para que los educadores lleven a cabo con éxito tan importante y esencial misión, en un momento de capital importancia educativa en el desarrollo del niño: su entrada en el 2º ciclo de Ed. Infantil. Por una parte, llena una laguna existente en la literatura sobre el tema hecha por educadores. El libro aporta una información muy completa sobre el desarrollo del lenguaje de los 0 a los 3 años. Además se repasan y critican las principales teorías explicativas de dicho desarrollo. Por otra parte, a partir de un estudio observacional muy preciso, se aportan valiosos instrumentos para la descripción y evaluación del lenguaje a su entrada en el 2º ciclo de Ed. Infantil. Estos instrumentos incluyen escalas con las que comparar el lenguaje observado, desde el punto de vista formal y funcional, medidas de sus diversos aspectos, e indicaciones acerca del papel desempeñado por el interlocutor adulto, de las que podrán inferirse actitudes comunicativas más eficaces por parte del educador. En fin, a través de las páginas de este libro, el educador tienen la oportunidad de conocer de una forma comprensiva cómo se desarrolló el lenguaje y de reflexionar sobre su propia acción educativa, así como de apropiarse de unas herramientas que le permitan una mayor efectividad en su actividad profesional.